Baby, baby, baby, light my way. ¡Tanto tiempo! Casi toda una vida. Ni siquiera sabía decir mamá. Más de quince años ya son suficiente. Al menos ahí va mi vida entera, que, pese a cortesías de última hora, es la que sólo a mi me importa. Echaba de menos esta canción. Toda ella. Tal vez por la imposibilidad de hacer otra cosa que escucharla y añorarla. No puedo volver a los tres años. Por si sirviera de consuelo, vuelvo a prender el palo de la escoba de guitarra, y a simular algo que nunca llegaría más que a simular. Gritando. No hay nadie. Nunca hay nadie alrededor. Baby, baby, baby... Y así una vez tras otra. Nada hay más repetitivo que estas tres insulsas palabras. ¿Cuántas veces llegué a rebobinarla en la cinta en la que estaba grabada? Perdí la cuenta con cuatro años. ¿Dónde quedó aquella cinta de cassette? Ahora la escucho desde un disco regrabable, síntoma de algo que va con el tiempo. Sin embargo, nosotros siempre vamos en su contra. No lo sé. Es domingo. Bastantes son ya las impertinencias que pasan por mi cabeza como para darle vueltas a una más. Y, ésta, inexplicable: el tiempo. Gran cuestión. Tanto como desesperante. No nos desesperemos, al menos no mientras duren estos acordes: ¡oh, come on!
Para muchos apenas sugerirá nada. Acordes, como todo. Aunque los hay que ni eso. Tienen suficiente con la cadera multimillonaria de cualquier pituso de moda. No se molestan en más, conformistas ellos. Y malogrados habitantes del mundo de vibraciones (acústicas y no tanto). Ni tan siquiera tiene algo que ver el título: ultravioleta. ¿Ultra qué? La física nunca ha sido lo mío. He corrido espantada de ella en cuanto he podido, sin ningún motivo, porque todo es física. De cualquier tipo. El disco da absolutamente lo mismo. Al igual que el resto de canciones que mantienen a ésta rodeada en el décimo lugar del disco. ¿Cómo se ordenan las canciones? ¿Cómo se ordenó Achtung baby?
Dicen hoy que amor es la palabra más bonita de nuestro idioma. ¡Qué disparate! ¿Acaso no saben hablar o qué? Amor no es la más bonita, ni tan siquiera la más sonora, la más rimbombante, o la más pálida. No es una palabra. No podría serlo de ninguna de las maneras. No es bonita. No es nada. Simplemente somos unos desesperados sentimentalistas que no saben otra cosa para superar su patetismo al intentar decir palabras bonitas a sus amores improvisados y no conseguirlo. Amor no es nada. Amar, tal vez. Amor, no. ¿Alguien sabe qué es el amor? Y no me vengan con cursilerías. Prueba de que no es bonita es que se pueden conseguir varias combinaciones de letras con esas mismas cuatro y ni tan siquiera nos emocionamos con su sonido desordenado. Roma. ¿Quién va a sentir algo por roma? Mora: ¿qué hay de mora? Juegos, sin más. Cuatro letras no son suficientes para una palabra bonita. Amarás tiene incluso más fuerza y belleza instantánea que amor. Una palabra bonita no puede terminar en una erre. Erre que erre. No puede ser. No estoy de acuerdo, yo hubiera elegido cualquier otra. Zapatero es incluso más emocionante. ¿Y por qué no música o noche o alféizar? Juegos y más juegos. ¿Cuánto se puede amar una canción sin saber que la amamos porque es nuestra? ¿Cómo puedo seguir escuchando esta letra?
Me noto cansada. Pienso cosas absurdas. Lamentablemente, todos lo hacemos alguna vez. Lo mío lleva así ya un tiempo. Últimamente juego a recordar más de lo que sería conveniente. Pero es que últimamente ando hacia atrás. No tengo los ojos delante de la cara, tal vez porque no quiera ver más allá. Junio se acerca. Prefiero cerrarlos o simplemente conservarlos en otra dirección cualquiera. Hoy vi esta canción otra vez. ¿Cómo se ve una canción, dirán? Cerrando los ojos tras rodear las cuatro paredes de la habitación con un vistazo rápido y sentirte en el epicentro de ella. De la misma habitación en la que hace una vida gritabas lo mismo y nadie oía. Mucho tiempo. Pronto para recordar. Es inevitable hacerlo. Tal vez mañana pueda sacar un ojo del bolsillo, reinsertarlo en el rostro y fijar la vista hacia delante, con mareo incluido, como una persona normal y corriente. No sin antes escuchar por no sé qué vez el mismo inicio, la misma repetitiva guitarra, y como si fuera nueva. El mismo repetitivo mundo mío en ella. Y clamar para que nadie me escuche a mí ahora. No, no escuchen por favor. Como si estuvieran en mitad de un océano. And the day is as dark as the night is long, gritas. ¿Cuántas veces? Antes solía rebobinar. Ahora basta dar un toquecito a una tecla minúscula. Y comienza con tu vida sobre susurros:
Para muchos apenas sugerirá nada. Acordes, como todo. Aunque los hay que ni eso. Tienen suficiente con la cadera multimillonaria de cualquier pituso de moda. No se molestan en más, conformistas ellos. Y malogrados habitantes del mundo de vibraciones (acústicas y no tanto). Ni tan siquiera tiene algo que ver el título: ultravioleta. ¿Ultra qué? La física nunca ha sido lo mío. He corrido espantada de ella en cuanto he podido, sin ningún motivo, porque todo es física. De cualquier tipo. El disco da absolutamente lo mismo. Al igual que el resto de canciones que mantienen a ésta rodeada en el décimo lugar del disco. ¿Cómo se ordenan las canciones? ¿Cómo se ordenó Achtung baby?
Dicen hoy que amor es la palabra más bonita de nuestro idioma. ¡Qué disparate! ¿Acaso no saben hablar o qué? Amor no es la más bonita, ni tan siquiera la más sonora, la más rimbombante, o la más pálida. No es una palabra. No podría serlo de ninguna de las maneras. No es bonita. No es nada. Simplemente somos unos desesperados sentimentalistas que no saben otra cosa para superar su patetismo al intentar decir palabras bonitas a sus amores improvisados y no conseguirlo. Amor no es nada. Amar, tal vez. Amor, no. ¿Alguien sabe qué es el amor? Y no me vengan con cursilerías. Prueba de que no es bonita es que se pueden conseguir varias combinaciones de letras con esas mismas cuatro y ni tan siquiera nos emocionamos con su sonido desordenado. Roma. ¿Quién va a sentir algo por roma? Mora: ¿qué hay de mora? Juegos, sin más. Cuatro letras no son suficientes para una palabra bonita. Amarás tiene incluso más fuerza y belleza instantánea que amor. Una palabra bonita no puede terminar en una erre. Erre que erre. No puede ser. No estoy de acuerdo, yo hubiera elegido cualquier otra. Zapatero es incluso más emocionante. ¿Y por qué no música o noche o alféizar? Juegos y más juegos. ¿Cuánto se puede amar una canción sin saber que la amamos porque es nuestra? ¿Cómo puedo seguir escuchando esta letra?
Me noto cansada. Pienso cosas absurdas. Lamentablemente, todos lo hacemos alguna vez. Lo mío lleva así ya un tiempo. Últimamente juego a recordar más de lo que sería conveniente. Pero es que últimamente ando hacia atrás. No tengo los ojos delante de la cara, tal vez porque no quiera ver más allá. Junio se acerca. Prefiero cerrarlos o simplemente conservarlos en otra dirección cualquiera. Hoy vi esta canción otra vez. ¿Cómo se ve una canción, dirán? Cerrando los ojos tras rodear las cuatro paredes de la habitación con un vistazo rápido y sentirte en el epicentro de ella. De la misma habitación en la que hace una vida gritabas lo mismo y nadie oía. Mucho tiempo. Pronto para recordar. Es inevitable hacerlo. Tal vez mañana pueda sacar un ojo del bolsillo, reinsertarlo en el rostro y fijar la vista hacia delante, con mareo incluido, como una persona normal y corriente. No sin antes escuchar por no sé qué vez el mismo inicio, la misma repetitiva guitarra, y como si fuera nueva. El mismo repetitivo mundo mío en ella. Y clamar para que nadie me escuche a mí ahora. No, no escuchen por favor. Como si estuvieran en mitad de un océano. And the day is as dark as the night is long, gritas. ¿Cuántas veces? Antes solía rebobinar. Ahora basta dar un toquecito a una tecla minúscula. Y comienza con tu vida sobre susurros:
“Sometimes I feel like I don't know
Sometimes I feel like checkin' out
I want to get it wrong
Can't always be strong
And love it won't be long...”
Y yo grito: light my way. ¡Baby, baby, baby! Cuando las calles no tienen nombre. ¡Baby! Con la luz apagada…
1 comentario:
CUATRO LETRAS NO SON SUFICIENTES PARA UNA PALABRA BONITA .." , DIRÍA QUE SI , Y DOS LETRAS TAMBIÉN , UN "SI " ESPERADO ¿ NO ES UNA HERMOSA PALABRA ? .Y TRES = PAZ .
ESTE DESESPERADO SENTIMENTALISTA , QUE TRATA DE SUPERAR SU PATETISMO , CONSIDERA QUE ES HERMOSA LA PALABRA AMOR .
CAERÍA EN CURSILERÍAS , SI TRATO DE EXPLICAR ALGO .
DE TODAS MANERAS ME PARECE BRILLANTE TU ESCRITO ...ESCRITO CON MUCHA REBELDÍA Y NOSTALGIA ...
ES SOLO UNA OPINIÓN
CARIÑOS MARTA
ADALBERTO
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